El Ibis Styles en París es una buena opción. La ubicación es perfecta, justo al lado del metro y con un desayuno variado que me encantó. La decoración del hotel es bonita, pero las habitaciones son un poco pequeñas y el ascensor es diminuto. Sin embargo, volvería sin duda.

El wi-fi funcionó bien y el personal fue amable. Baño pequeño con bañera incómoda.

buena estancia pero con detalles que mejorar

La ubicación es excelente, cerca del metro y de un parque precioso. El personal fue amable y siempre dispuesto a ayudar. Aprecié que el hotel ofrecía un ambiente tranquilo y bien decorado, lo que hizo que mi estancia fuera más agradable.

El desayuno, aunque estuvo bien, le faltaba variedad en los quesos y embutidos.

Desayuno con vistas a la calle

El personal fue increíblemente amable, siempre dispuesto a ayudar. La ubicación es excelente, a pasos del metro y cerca del hermoso parque Buttes Chaumont. Y el desayuno, servido con vistas a la calle, fue un deleite cada mañana.

Las habitaciones son realmente pequeñas y carecen de espacio para moverse cómodamente. Además, el ascensor es diminuto, lo que hace complicado el transporte de maletas.

Me encantó la decoración moderna del hotel y la comodidad de la cama. La limpieza diaria fue impecable y el desayuno ofrecía una buena variedad de opciones, lo que hacía que cada mañana fuera un placer.

Poder contar con más espacio en la habitación.

El Ibis Styles ofrece una ubicación excelente, a pocos pasos de la estación de metro Laumière y a solo cinco minutos del hermoso parque Buttes Chaumont. La habitación, aunque pequeña, era cómoda y tenía un aire acondicionado moderno que funcionaba bien. Disfruté de un desayuno buffet excelente y el personal fue muy amable y servicial durante toda mi estancia.

El ascensor es diminuto.

Tuve una buena experiencia en este hotel. El desayuno era básico, pero completo. La ubicación era excelente, justo al lado del metro, lo que facilitaba el acceso a la ciudad. Me gustó el personal, siempre amable y dispuesto a ayudar. Uno de los momentos más agradables fue poder disfrutar de un desayuno con vistas a la calle. Como español, aprecio esas pequeñas sorpresas en mis viajes.

El espacio en las habitaciones era reducido. El ascensor también era muy pequeño.

seguro que volveré

La habitación era cómoda, con aire acondicionado que funcionaba genial y un baño privado equipado. Me encantó el desayuno variado, aunque era básico, con vistas a la calle. El personal fue siempre amable y la limpieza impecable. Un detalle chido fueron los caramelos gratis en la recepción.

os recomiendo este fantástico lugar for una breve parada

Cómodo hotel, excelente ubicación, con el transporte público justo enfrente para explorar la ciudad. además, me encantó el desayuno variado y el personal siempre dispuesto a ayudar.

Todo fue como me esperaba

La habitación era cómoda, con una cama muy agradable. La limpieza diaria fue impecable y el aire acondicionado funcionaba genial, ideal para el calor. Aunque un poco pequeña, disfruté de la decoración moderna. Un gran punto a favor fue el desayuno variado y todo estaba limpio siempre. Me encantó tomar el café disponible las 24 horas y las vistas mientras desayunaba.

La ubicación es excelente, a pasos de la estación Laumière y cerca del hermoso parque Buttes Chaumont. El desayuno es variado y muy completo, sin aglomeraciones, lo que permite disfrutarlo con calma. La habitación, aunque pequeña, cuenta con buen ambiente moderno y un aire acondicionado que funcionaba a la perfección.

Espacio reducido

Fue una opción perfecta para una aventura de fin de semana en París, con un valor fantástico. La terraza con jardín es un lugar ideal para relajarse después de un ajetreado día. Recomiendo disfrutar del desayuno temprano para evitar las colas.

La ubicación es excelente, con el metro al lado y un parque precioso cerca. El desayuno era abundante con opciones para intolerantes y me impresionó la limpieza diaria. Además, los caramelos gratis en la recepción fueron un detalle encantador para los niños.

Mi mujer dice que habría sido genial que hubiera más espacio en la habitación.

La habitación era tranquila y cómoda, con una bonita decoración. El desayuno fue completo y sin aglomeraciones, lo que se agradece. Sin embargo, el baño tenía una bañera un poco incómoda y las ventanas dejaron pasar un poco de frío.